Más de 50 congresistas estadounidenses han solicitado la suspensión de las ayudas a la Policía Nacional colombiana, incluido el fin de las ventas de armas y material, en respuesta a la dura represión contra las protestas de las últimas semanas en el país latinoamericano.
La misiva, dirigida al secretario de Estado, Antony Blinken, está firmada por los congresistas como James P. McGovern, Mark Pocan, Jan Schakowsky y Raúl Grijalva y manifiesta su "grave preocupación" por la situación en Colombia e insta al Gobierno de Estados Unidos a denunciar la brutalidad policial.
Así, solicitan la suspensión de la ayuda a la policía y una interrupción de la venta de equipos o capacitación hasta que se establezcan y cumplan los estándares de Derechos Humanos, informa Bloomberg.
Las fuerzas de seguridad de Colombia, especialmente su Policía Nacional, están más desatadas de lo que hemos visto en décadas de conflictos: cientos de videos de ciudadanos muestran el uso agresivo e indiscriminado de armas letales y no letales contra ciudadanos de formas que violan la ley colombiana y las normas internacionales de derechos humanos". argumentan.
Por ello, Washington debería "advertir al Gobierno de Colombia contra el despliegue de sus fuerzas armadas para el control de multitudes".
Las protestas comenzaron a raíz de la presentación de un proyecto de reforma fiscal. La iniciativa ha sido finalmente retirada, pero las protestas contra el Gobierno y la violenta represión han continuado con una huelga general activa desde el 28 de abril.
Más de 40 personas han muerto durante las protestas y la policía ha sido acusada de hacer un uso excesivo de la fuerza para disolver las manifestaciones.